Doña Croqueta

Lo sé, he empezado muy perezoso el año... Aparezco menos por aquí que por misa, y ya es decir... Pero bueno, hoy he encontrado un hueco y he visto una historia que me apetecía compartir. El tema es serio porque la revista Traveler que se ha atrevido a seleccionar las 12 mejores croquetas del país. Casi na...

Yo os paso integramente la selección que no pinta nada mal... Seguro que vosotros también añadiríais las vuestras (o de vuestra madre...)

Salud!

1) Casa Marcial (La Salgar, 10. Parres-La Salgar. Asturias). Las croquetas de Nacho Manzano tienen un intenso sabor a jamón y una bechamel fuera de lo normal. Con vocación viajera, puedes encontrar sus croquetas también en La salgar, su restaurante de Gijón, y en Ibérica, la cadena de bares de tapas que tiene en Londres, donde es un grandísimo embajador de la cocina española.

2) Echaurren (Padre José García, 19. Ezcaray. La Rioja). Las croquetas de Francis Paniego, heredero de la receta de su madre Marisa Sánchez son un mito. Además de jamón, incluyen pollo y huevo duro. El secreto horas de “darle a la muñeca” para que la bechamel sea cremosa y fina.

3) Taberna Arzabal (Doctor Castelo, 2. Madrid) Se elaboran con leche de oveja, lo que les da una untuosidad y regusto especial, y jamón ibérico. De tamaño intermedio, la proporción entre rebozado y bechamel es perfecta.

4) El quinto vino (Hernani, 48. Madrid) Las croquetas de doña Esperanza tienen una larga lista de adictos. Croquetas tabernarias, formadas a mano, de hermoso tamaño y con un sabor a jamón

5) Casa Gerardo (Ctra. Nal. 632, Km. 79,5. Prendes. Asturias). Cremosas, ligeras, bien fritas... La receta de la familia Morán soporta incólume el paso del tiempo. Para disfrutarlas en la barra, con una copa de champán.

6) Viavelez (General Perón, 10. Madrid).  El asturiano Paco Ron ha traído hasta madrid la tradición de la buena croqueta asturiana. Tremendamente cremosas y bien fritas. Se pueden tomar en la barra o en el restaurante. Por supuesto, de jamón.

7) IO (Manuel de Falla, 5. Madrid). El nuevo local de Javier Oyrbide mantiene en carta uno de los hitos de Príncipe de Viana, el restaurante que fundó su padre. Croquetas de jamón, de pequeño tamaño, elegantes y finísimas como corresponde a la cocina burguesa.

8) Asador El Ciprés (Plaza Primo de Rivera, 1. Aranda de Duero. Burgos). Croquetas de corte casero y sabor intenso a jamón. Cremosas, bien fritas, con el rebozado ligero y crujiente.

9) MercatBar (Joaquín Costa, 25. Valencia) Crujientes y doradas, con el interior repleto de jamón ibérico, así son las croquetas de Quique Dacosta.

10) Puerta 57 (Padre Damián s/n. Madrid). En una de las barras mejor surtidas de Madrid, croquetas de buen tamaño, bechamel suave e intenso sabor a jamón.

11) Mirror (Córcega, 255. Barcelona) El cocinero Paco Pérez ofrece en Barcelona unas soberbias croquetas de jamón. Alta cocina aplicada a una receta con tradición.

12) Keki (Fuensanta, 4. Murcia). Altísimo nivel el de estas croquetas para comer en dos bocados que se rebozan en panko (pan japonés) y resultan más crujientes de lo normal.

Ale, sólo quedar visitarlos todos y puntuar...

And the winner is...Burgos!!!

La ocasión merece la pena...Después de varios días en las que el trabajo y la pereza no me han traído por estos lares, vuelvo a la carga con una gran noticia que he descubierto gracias a una burgalesa insigne: mi prima Celia. Sí, sí...Burgos, es la nueva Capital española de la Gastronomía 2013!

Ya hablamos del tema en una entrada pasada del blog y los que votan este asunto han valorado que la oferta de Burgos era la mejor por ser "una propuesta creativa que apuesta por la participación, por el producto de calidad, el enoturismo y el equilibrio entre tradición e innovación".

Poker de quesos

Este mes he tenido mi primera experiencia quesera online. Me pareció divertida la propuesta de Mumumio de probar 5 quesos cada mes y me apunté, como buen ratón, a su Club del Queso. No me extenderé mucho porque los quesos son algo muy particular y para gustos los colores, pero sí me gustaría apuntar los nombres y algunas breves reseñas.

Para mi el crack de esta primera tanda es un queso segoviano de oveja churra llamado Moncedillo.

Más vino!

Noviembre está siendo muy mandanguero, no sé si es el otoño o los fastos de mi cumpleaños pero estamos viviendo momentos gastronómicos bastante importantes que me han servido para recolectar algunos vinos que he probado en estas semanas y que tenía aparcados para ponerlos del tirón. Eso sí, nunca esperéis que pueda decir cosas como las que leía esta mañana... "Capa medio-alta, color guinda y reflejo violaceo juvenil. Muy lacteo y aromas de panaderia, lactico. Rosas de 2 dias. En boca hay fruta roja silvestre(fresas), coca cola, nuez moscada, es carbonico en su maceracion, rugoso al paladar por su roble americano, largo postgusto tostado". Joder pavo!!! ¿Cómo la peña puede oler en un vino a rosas de 2 días???? ¿Y a Coca-Cola?? Como no sea en un Kalimotxo... Alucino. En fin, que a lo que voy, que pongo lo que voy probando, unos me gustan más, otros menos, depende del momento, la comida y, claro está, la calidad... Vamos allá, Castillo de Argum, presente!

Esla última secuela de mi sección de "Vinos por menos de 5€"...

Comiendo tiburón

Ayer probé un pescado nuevo. Nada de las doradas, lubinas, rapes, gallos, salmones o lenguados...nada más y nada menos que...chan, chan, chan, chan, chan, chananannn...(imitando la sintonía de la película) Tiburón! 

El caso es que yo iba buscando emperador y la la pescadera me ofreció uno muy similar llamado Marrajo. La verdad es que el aspecto es muy similar, de carne más blanca aún y textura más carnosa si cabe, es como comerse una ternera!! La principal diferencia, aparte del precio, ya que el emperador es 3 veces más caro, es que el emperador tiene esqueleto oseo y el marrajo cartilaginoso. Vamos, que el emperador tiene espinas y el marrajo, no. Otra diferencia fundamental es que el Marrajo es el mayor depredador de Emperadores o Pez Espada que existe...El malo se come al bueno.

Vamos que, este Marrajo o Tiburón Mako, como también le llaman, es rápido y criminal e incluso ha atacado algún pescador que se ha pasado de listo... En cuanto al sabor y textura, que es lo que a vamos, tampoco es para tirar cohetes. Su carne es prieta, en exceso para un pescado, es poco fino y como te pases en la plancha te acabas comiendo un tiburón zapatilla... Macerado con limón, ajo y perejil y con un rápido trallazo de plancha todavía tiene un pase, insisto, siempre y cuando no se pase...

Conclusión, un pescado sin  más que no creo que vuelva a pasar por mi cocina. Y no es que no me guste el tiburón, el Gran Tiburón Blanco suena a gloria celestial...

Comiendo en IKEA

IKEA, ese laberinto deperdición lleno de cosas con nombres raros tipo Gründtal, Knubbig, Fridel o Färgrik donde siempre sales con algo... 

Pero este gran complejo es mucho más que sinuosos pasillos llenos de muebles, menaje, lámparas y sillones. El verdadero festival está a la salida, pasando las cajas, un oasis lleno de productos suecos que cuando menos merece la pena bichear...

La verdad es que aparte del mito de las impresionantes rubias y de los chicharrazos del díscolo Ibrahimovic, poco más puedo decir de Suecia salvo que las famosas albóndigas tienen su punto, que los perritos con cebolla crujiente te parecen lo más grande del mundo después de salir jarto de andar y que la salsa de eneldo que tienen para el salmón está de muerte.

Ah, sí, se me olvidaba... en Suecia hay un grupazo de Rock que se te va la olla... ¿Se ha notado mucho que esta entrada era una excusa para ponerlo? ;-)

Nomiku: un alien en tu cocina

La peña ya no sabe qué inventar... 3 pavos se sientan a tomar unas birras y se les ocurre crear un gadget  para cocinar los alimentos a su temperatura óptima y constante. ¿El resultado? Un instrumento alienígena de forma fálica llamado Nomiku. No, no es el nombre de un guerrero Manga, es lo último en artilugios culinarios.

Su funcionamiento es bien sencillo: se introduce en una olla con agua y, mediante una rueda, se elige la temperatura exacta para llevar a ebullición lo que se vaya a cocinar. Sencillo y práctico. Pero lo realmente flipante del asunto es que el aparato en cuestión lo está petando en internet. Sus tres creadores (tres jóvenes llamados Wipop Bam Suppipat, Lisa Q. Fetterman y Abe Fetterman) presentaron esta idea a principios de verano en la web americana Kickstarter, pensada para que diferentes prototipos y nuevas invenciones, gracias a las aportaciones económicas de los usuarios, consigan el capital suficiente para ser comercializadas. Vamos, una especie de crowdfounding para inventores. 

Resultado: Tan solo once días después de subir el vídeo de presentación, sus desarrolladores no solo consiguieron los 200.000 dólares necesarios para sacar adelante el proyecto sino que casi triplicaron esta cifra. Casi nada. Eso sí, si queréis regalárselo a alguien por Reyes, id rompiendo la hucha porque el bicho en cuestión ronda los 300€ y sólo se puede encontrar online, de momento...

En el vídeo que aparece en su web, una amigable señorita te explica las maravillosas virtudes del aparato. Pones agua, seleccionas la temperatura, metes el alimento y listo! En su punto justo de cocción y conservando las propiedades de los alimentos.

Por lo que dice en su web, parece que, de momento, sólo puedes reservarlo pagando 1$ de fianza y tienen previsto empezar a venderlos a partir de Marzo del próximo año.  Habrá que darle un voto de confianza...