lunes, 19 de noviembre de 2012

Su majestad el Níscalo, emperador del Otoño

Es uno de los grandes recuerdos de juventud que tengo y procuro mantener la tradición. Desde muy pequeño he acompañado a mi padre a buscar esta joya anaranjada por los pinares próximos al embalse del Atazar, al norte de Madrid. Pocas cosas son tan gratificantes como volver con tu cesta llena de níscalos y apretarte, orgulloso de tu botín, un gran bocata de tortilla y tirar de la bota de vino...


Las lluvias de Octubre auguraban una gran temporada micológica y las suaves temperaturas de este Noviembre han llenado los montes de estas maravillas que nos da la tierra. No es que sea una seta espectacularmente sabrosa ni muy fina, seguramente los rebozuelos, las de cardo o incluso las trompetas de la muerte le ganan en este aspecto. Pero el níscalo es una seta que se deja hacer, saca todo su pontecial con su amigo el ajo y es un gran compañero de viaje en guisos y estofados... Y es quizá esto, su versatilidad, lo que la hace tan apreciada, allá donde va, o plato al que se suma, siempre aporta su granito de arena, discreto pero sumando...



Todavía tengo una cestita en la nevera de la última remesa que logro mi padre este finde pasado. Anoche cayeron en revuelto, el sábado acompañando a unas maravillosas pochas, esta noche quizá salteen con unas judias verdes maravillosas... 



Como no soy de publicar recetas, os dejo algunos algunas maravillosas de blogs amigos donde darle vida a los níscalos que rulen por vuestras casas:

Espaquettis con níscalos
Tortilla de níscalos y jamón 
Pizza de níscalos y cebollas glaseadas
Canelones de níscalos y trigueros
Conejo guisado con níscalos
Patatas con níscalos
Calabacines rellenos de níscalos
Níscalos al ajillo con jamón
Arroz cremoso con níscalos

Ale!! A disfrutar de las grandes maravillas que nos deja Noviembre...







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